Según los cables difundidos por Wikileaks aseguran que la presidenta Cristina Fernández dijo que su homólogo venezolano estaba equivocado y a menudo hablaba sin pensar.
Buenos Aires.- La presidenta argentina, Cristina Fernández, y su antecesor en el cargo, Néstor Kichner, llegaron a criticar a su firme aliado en la región, el venezolano Hugo Chávez, para acercar posiciones con Estados Unidos, según cables difundidos por WikiLeaks que publica hoy el diario argentino La Nación.
Fernández "dijo que pensaba que Chávez estaba equivocado y que a menudo habla sin pensar. 'Todos debemos ser más cuidados con lo que decimos en público'", afirmó la mandataria en mayo de 2009 en un encuentro con el entonces embajador de Estados Unidos en Buenos Aires, Earl Anthony Wayne, según relató el funcionario en un despacho diplomático dos días después, señaló Efe.
Su esposo y antecesor, el fallecido Néstor Kirchner, fue más allá durante su mandato, ya que en 2005 llegó a decir en un encuentro con legisladores estadounidenses que el mandatario venezolano "habla demasiado", y que si la potencia norteamericana "actúa con inteligencia, Chávez será neutralizado".
"Como le dije al (entonces) presidente (George W.) Bush, vamos a colaborar con los Estados Unidos para mejorar la situación en Venezuela", señaló en ese encuentro en la Casa Rosada (sede del Gobierno) el expresidente (2003-2007), según otro cable sobre la reunión.
El centenario diario bonaerense La Nación, crítico con el Gobierno de Fernández, comenzó a difundir hoy extractos de un total de 2.500 cables que le ha facilitado WikiLeaks, que también entregó material el pasado mes al diario Página/12, afín al Ejecutivo.
Según estos nuevos textos, en su mayoría cables enviados desde la embajada estadounidense en la capital argentina entre 2003 y mediados de 2010, miembros del Gobierno de Fernández, entre ellos el excanciller Jorge Taiana o el actual ministro de Economía, Amado Boudou, expresaron en varias ocasiones el deseo de concretar un encuentro entre la mandataria y su par de EEUU.
"Poniéndose serio, Taiana enfatizó que había llegado el momento de que los presidentes Fernández y (Barack) Obama se reunieran. Le dijo al embajador que 'si Estados Unidos no la cultiva (la relación con Argentina), lo harán otros'. Dijo que el prolongado retraso para acordar una reunión haría un bochorno para Fernández, con sus opositores mofándose de ella por su fracaso para obtenerla", afirma un cable de la embajada de septiembre de 2009.
Según otro despacho de febrero de 2010, la mandataria aseguró en un encuentro con legisladores de EEUU "que Obama se ha reunido con muchos otros líderes sudamericanos, pero no con ella, y que el nuevo (secretario de Estado adjunto de EEUU para Latinoamérica, Arturo) Valenzuela expresó críticas hacia el Gobierno durante su primera visita a la Argentina el mes pasado".
"No puedo ignorar eso", manifestó Fernández, quien según otros cables previos había admitido en 2009 estar "fascinada" por Obama, y afirmado que quería mantener "relaciones más estrechas" con Estados Unidos.
El pasado enero, cuando el presidente de EEUU anunció la gira que realizará por la región en los próximos días, que excluye a Argentina, el único miembro del Gobierno que hizo declaraciones al respecto fue el canciller argentino, Héctor Timerman, que en los últimos meses no ha escatimado en críticas a la potencia norteamericana.
Al conocer que Obama visitaría Chile y Brasil pero no Argentina, Timerman aseguró que Estados Unidos "más que amistades, tiene intereses" y criticó algunos puntos de su gestión en la relación bilateral.
En las últimas semanas, la relación entre ambos países se ha visto tensada por la decisión de Argentina de incautar parte de la carga de un avión militar de Estados Unidos que llegó al país con material para un curso policial conjunto, lo que ha causado un encontronazo diplomático.
Los despachos diplomáticos difundidos en los últimos meses por WikiLeaks también han contribuido a deteriorar la relación de altibajos que mantienen ambos países.
Los cables revelaron que EEUU pidió información a su embajada en Buenos Aires sobre el estado mental y de ánimo de Fernández, y destaparon la preocupación de Washington por la "corrupción generalizada" del país y el empeño de Argentina de obstaculizar las exploraciones petroleras en Malvinas, entre otros aspectos.